La deflación es lo contrario a la inflación, lo que significa que cuando se produce la deflación, el precio final al consumidor está bajando, es lo mismo que decir que la inflación es negativa, puede ocurrir cuando hay una gran oferta de un producto o un servicio.
Con los precios más bajos de los bienes y servicios, una persona puede comprar más y pagar menos, pero una deflación prolongada puede ser una señal de problemas en la economía.
La deflación puede medirse por la caída generalizada de los precios durante al menos un año, puesto que, si solo uno u dos artículos sufren una caída, y este periodo es de unos pocos meses, solo se puede considerar como una fluctuación común de los precios.
¿Qué es la inflación?
Este es quizás uno de los términos más conocidos en el ámbito de la economía, la inflación indica el aumento generalizado de los precios de diferentes artículos esenciales en la vida diaria de la población, ya sean bienes o servicios.
La tasa de inflación se refiere a la cesta de productos y servicios en un periodo determinado, lo son:
- Transporte.
- Alimentos y bebidas.
- Vivienda.
- Salud y cuidado personal.
- Gastos personales.
- Comunicación.
- Educación.
- Ropa.
El valor de estas partidas se mide mensualmente y sirve para indicar si hay inflación o deflación, con el aumento de los precios, el poder adquisitivo de las personas disminuye con el tiempo, es decir, se necesita más dinero para comprar el mismo producto o servicio, una mala situación para los consumidores y para las empresas que dejan de vender.
Índice de precios al consumidor
El índice que mide la variación de estos productos, y que es una referencia para el sistema de objetivos de inflación, se llama IPC (Índice de Precios al Consumo). Refleja los patrones y hábitos de consumo de las familias.
Por lo tanto, cuando la inflación de un mes determinado fue del 1%, significa que los artículos mencionados anteriormente aumentaron un 1% en ese periodo.
¿Qué es la desinflación?
La desinflación se produce cuando los precios suben a un ritmo más lento, lo que significa que hay un proceso de ralentización del proceso inflacionista, de este modo, al contrario de lo que ocurre con la deflación, cuando hay desinflación, el consumidor se ve motivado a anticipar sus compras, ya que la tendencia de los precios es a seguir subiendo.
¿Por qué la deflación prolongada es una mala señal para la economía?
Aunque la deflación es una bajada de precios, no es tan buena como puede parecer, al principio puede incluso fomentar el consumo, ya que se pueden comprar más productos a precios más bajos, sin embargo, si se prolonga demasiado, puede ser un indicio de problemas en la economía.
Cuando la deflación se prolonga y el gobierno no crea medidas para controlar la caída de los precios, puede traer un cuadro de recesión económica al país, según el comportamiento de los consumidores, con la deflación la gente opta por consumir más, ya que los precios tienden a mantenerse bajos.
Además, esta decisión del consumidor puede hacer que los precios bajen aún más, al final se produce un círculo vicioso que hace que la deflación aumente cada vez más y que los precios caigan al mismo ritmo.
Como las empresas venden menos productos y servicios, las perspectivas de beneficios tampoco son buenas, el resultado es que muchas de ellas optan por no contratar nuevos empleados e incluso despiden a algunos que ya estaban empleados, con menos puestos de trabajo, la situación se agrava aún más, lo que provoca el despido y el desempleo.
¿Cómo se puede combatir la deflación?
Según los expertos, la forma que tiene el gobierno de luchar contra la deflación es mantener el dinero en circulación, en este sentido, uno de los principales mecanismos que tiene el gobierno para controlar la deflación es la emisión de dinero, poniendo más dinero en circulación, esta medida es capaz de generar inflación durante un periodo que varía entre 3 y 6 meses, la otra forma sería mantener el tipo de interés bajo.
