El proceso contable presenta constantemente ciertas situaciones en las que un importe o una partida de los estados financieros no puede medirse con precisión, las estimaciones contables, por tanto, son una aproximación a un valor que debe abonarse en partidas para las que no se dispone de un medio de medición preciso.
En los estados financieros, los importes en libros de los activos, pasivos, ingresos o gastos del periodo en el que dichos importes no pueden medirse con precisión, se determinan utilizando estimaciones contables.
¿Por qué se necesitan las estimaciones contables?
A falta de un valor preciso, un contador no puede cargar o abonar cualquier cantidad sin un sustento, es necesario establecer un conjunto de principios o políticas contables para llegar a una estimación, por lo tanto, las estimaciones contables sirven para proporcionar a los contadores una estimación razonable, de modo que se pueda realizar un registro preciso.
El proceso de llegar a las estimaciones implica la recopilación y el análisis de los datos pertinentes, esto significa que el método de estimación también puede utilizarse en otros ámbitos. Por ejemplo, si una empresa quiere saber cuánto debe amortizar la maquinaria, un contador podrá utilizar estos datos y estimar su valor a final de año.
Ejemplos de estimaciones contables
En situaciones reales, generalmente no se dispone de medios de medición precisos y, por tanto, la mayoría de los valores requieren aproximaciones, a continuación, se enlistan algunos casos que requieren de la estimación contable:
- Estimación de la vida útil, deterioro y revalorización de los activos no corrientes.
- Deudas incobrables.
- Cuentas por cobrar, como la provisión para pérdidas de préstamos y las cuentas por cobrar irrecuperables.
- Devengos y estimaciones de inventario.
- Instrumentos financieros.
- Estimación de la depreciación de una planta o maquinaria.
Mejores prácticas
Cuando se habla de las mejores prácticas a la hora de realizar estimaciones contables, tener un buen conocimiento de las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF) es un requisito previo, estas normas establecen reglas comunes que permiten que los estados financieros de todo el mundo sean coherentes, transparentes y comparables.
Algunas de las mejores prácticas para las estimaciones contables pueden ser:
- Asegurarse de que las estimaciones y también las hipótesis en las que se basan son razonables, una estimación demasiado optimista o demasiado pesimista podría tener que ser reconsiderada.
- Disponer de un proceso o marco adecuado que permita revisar periódicamente las estimaciones para que sean comparables con los importes reales, las grandes variaciones, cuando se comparan con las estimaciones anteriores, también pueden ser motivo de preocupación, a menos que haya una razón conocida para estas variaciones.
- En ciertos casos, también puede ser conveniente considerar la participación de terceros especialistas.
Políticas contables frente a estimaciones contables
Es importante distinguir entre las políticas contables y las estimaciones contables porque cualquier cambio en las políticas es un cambio en la forma de calcular la información financiera y, por lo general, se aplica de forma retrospectiva, en cambio, un cambio en las estimaciones contables es un cambio en la información financiera real y se aplica de forma prospectiva.