Por una parte, las utilidades contables de una empresa se tratan de los beneficios que una empresa genera a través de sus operaciones diarias y de los que informa en sus estados financieros, principalmente en el estado de resultados.
Las utilidades contables se comunican a las partes interesadas de la empresa, como sus propietarios o posibles inversores, y estas partes interesadas toman decisiones sobre su relación con la empresa basándose en los beneficios contables.
El beneficio contable de una empresa es el que se calcula deduciendo todos los costos y gastos de la empresa de los ingresos generados por la misma, estos gastos y costos consisten únicamente en los costos explícitos, los cuales se refieren a los costos que existen en los sistemas contables de la y que pueden afectar directamente a la rentabilidad de la misma.
Los costos explícitos o costos contables de una empresa incluyen los costos de producción o de servicios, como los costos de compra de materias primas, los costos salariales, los costos de servicios público, costos administrativos, entre otros.
Utilidad económica
La utilidad o beneficios económicos de una empresa son muy similares a utilidades contables porque estos se calculan deduciendo los costos explícitos de la empresa de sus ingresos, sin embargo, junto a los costos explícitos de la empresa, también se deducen sus costos implícitos.
El beneficio económico se rige por principios económicos y no por principios contables.
Los costos implícitos son los costos que soporta la empresa, pero que no existen en el sistema contable, estos costos están relacionados con el uso de los recursos de la empresa, es decir, se refieren principalmente a los costos de oportunidad soportados por la empresa al dedicar sus recursos a un determinado proyecto en lugar de utilizarlos para otro proyecto u otra actividad.
Los costos implícitos de una empresa se determinan calculando el costo de un uso alternativo de los recursos de una empresa, por ejemplo, una empresa utiliza su edificio en sus operaciones para generar unos beneficios de 10.000 al año, sin embargo, si la empresa alquila el mismo edificio, recibiría $5.000 de alquiler al año, los $5.000 de alquiler a los que renuncia la empresa para obtener $10.000 de beneficio son su costo de oportunidad o costo implícito.
Ejemplo utilidad contable contra utilidad económica
La empresa ABC generó unos ingresos de 10 millones en el período contable anterior, sus costos totales en sus libros, para el período ascendieron a 8 millones, para calcular la utilidad contable de la empresa ABC, tan solo se restan los gastos a los ingresos:
- Utilidad contable = 10 millones – 8 millones
- Utilidad contable = 2 millones
Esta utilidad contable de la empresa ABC se presentará en sus estados financieros, concretamente en su estado de pérdidas y ganancias, como utilidad neta.
Por los mismos recursos que la empresa ABC utilizó para generar el beneficio de 2 millones, la empresa ABC podría haber recibido un ingreso por intereses de 1 millón de pesos si hubiera invertido los recursos en un banco, dado que se renuncia a este millón de pesos para utilizar los recursos en las operaciones de la empresa, se trata de un costo de oportunidad.
Este costo de oportunidad también se conoce como costo implícito y se utiliza para calcular el beneficio económico de la empresa de la siguiente manera:
- Beneficio económico = 10 millones – (8 millones + 1 millón)
- = 10 millones – 9 millones
- = 1 millón de pesos
Este beneficio económico de la empresa ABC no tiene que ser comunicado a las partes interesadas en los estados financieros, sin embargo, una empresa puede optar por informar voluntariamente de su beneficio económico en su cuenta de pérdidas y ganancias junto con sus beneficios contables.
Los accionistas de la empresa y los posibles inversores pueden utilizar este beneficio económico para evaluar la eficiencia de la empresa en el uso de sus recursos, aun así, este beneficio económico, por sí solo, no puede utilizarse para evaluar la eficiencia de la empresa o tomar decisiones sobre la misma.
Este beneficio económico debe compararse con los beneficios económicos históricos de la empresa para las partes interesadas de la misma, con el fin de determinar si la eficiencia de la empresa, en la utilización de sus recursos, ha mejorado o disminuido.